22 de abril de 2024, 20:26 PM
22 de abril de 2024, 20:26 PM
“Tres años de paralizado el proyecto. El Gobierno quiere tapar tres años y medio de paralización del proyecto”, fueron las únicas palabras del exministro Luis Alberto Echazú antes de ingresar a celdas de la Felcc, luego que la presidenta de Yacimientos de Litio Bolivianos (YLB), Karla Calderón, acusara a Echazú y otras 10 personas por la comisión de cuatro delitos.
Al mediodía de este lunes quien fuera hombre fuerte del litio en el Gobierno de Evo Morales fue aprehendido por la Policía en su domicilio, orden de aprehensión que fue librada por tres fiscales, Ingrid Feraudi Guerra, Remberto Roca Galvis y José Yujra Paucara.
Los abogados del MAS acudieron rápidamente a defender a Echazú y su excolega Teresa Morales fue la más iracunda de las defensoras que acusó al presidente del Estado, Luis Arce, de intimidar a la dirigencia masista y los exministros.
De ese modo, el enfrentamiento entre Luis Arce y Evo Morales dio otro giro de espiral porque los arcistas afirman que, “no se puede perder tanto dinero”; mientras que los evistas aseguran que se trata de una ‘vendetta’ del arcismo por su fracaso en la política del litio que implementó Arce.
En mayo de 2008 se dio inicio a la construcción de la denominada “planta piloto de industrialización de litio” en la localidad de Llipi, departamento de Potosí. La edificación de la planta tomó cinco años, en enero de 2013 Evo Morales inauguraba la primera planta piloto de carbonato de litio a un costo de $us 19 millones.
El diseño de la planta estuvo a cargo de la empresa K-Utec AG Salt Tecnologies; la construcción de la obra fue entregada a la china Asociación Beinjing Maison Engineering Co Ltd. Machinery Enineering Corporation (Asociación MAISON-CMEC).
Esa parte de la edificación es la que fue cuestionada por las actuales autoridades, pues Carla Calderón relató que la calidad de la construcción de las piscinas fue observada por el uso de deficiente material de la geomembrana de las piscinas, las que tienen un espesor inferior a la exigencia de estándares internacionales.
Entre los investigados están un exdirector de operaciones, un gerente de la empresa, además de personal operativo de supervisión de obra y la empresa contratista, de tal modo que Echazú no es el único investigado en este caso.
