En medio de la creciente atención pública por el precio y la distribución de combustibles, Germán Jiménez, director de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) aseguró que los precios del diésel regular y la gasolina especial, que representan el 97% del consumo en el país, no han cambiado, mientras que los combustibles premium han experimentado leves reducciones debido a ajustes relacionados con el mercado internacional. Por lo que dijo que hay razón para la susceptibilidad.
Jiménez destacó que el precio de la gasolina especial sigue en Bs 3,74 por litro y el del diésel en Bs 3,72, reiterando que el costo de los combustibles subsidiados no ha sufrido modificaciones.
En cuanto a los combustibles de alto octanaje, señaló una reducción de hasta Bs 0,22 por litro y afirmó que estos representan solo entre el 3% y el 5% del consumo total.
“Se ha intentado generar zozobra y politizar esta situación. Sin embargo, los ajustes en los precios de las gasolinas premium y ultra premium responden a factores internacionales como las fluctuaciones del precio del petróleo y no a decisiones locales arbitrarias”, explicó.
Sobredemanda
Uno de los problemas más destacados durante la entrevista fue el contrabando de combustibles, particularmente en el departamento de Cochabamba. Según Jiménez, se detectaron 403 vehículos que cargaban combustibles en cantidades desproporcionadas, lo que generó una sobredemanda de 1,5 millones de litros en enero.
Como respuesta, la ANH ha reforzado los controles en estaciones de servicio y coordina operativos con la policía y las Fuerzas Armadas, logrando incautar más de 400 vehículos y 25 cisternas en 2023.
Jiménez también se refirió a la especulación en redes sociales que, según él, busca desestabilizar el clima político en un año electoral.
“Es fundamental que la población acceda a información oficial a través de la ANH y el Ministerio de Hidrocarburos para evitar confusiones generadas por intereses políticos”, manifestó.
El director aseguró que las importaciones de combustibles, provenientes de puntos como Arica y Santa Cruz, se mantienen con normalidad y que el abastecimiento está garantizado.
No obstante, las dudas persisten entre sectores productivos y usuarios comunes, quienes exigen medidas más efectivas para evitar desabastecimientos y que los beneficios del subsidio lleguen a quienes realmente lo necesitan.