27 de junio de 2024, 20:00 PM
27 de junio de 2024, 20:00 PM
Los pulmones verdes sufren la devastación por el fuego. De las más de 5 millones de hectáreas quemadas entre 2021 y 2023 en Santa Cruz, 2, 6 millones corresponden a áreas protegidas y reservas forestales, lo que equivale al 52,3% de la superficie afectada.
Los datos se conocieron durante el informe que rindió Luis Roberto Flores Orellana, director ejecutivo de la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Bosques y Tierras (ABT) en la Asamblea Legislativa Departamental, donde se destacó el trabajo coordinado en la lucha contra incendios entre los tres niveles de Estado, lo que ha permitido establecer un cronograma de quemas controladas y un periodo regionalizado de prohibición de estas actividades. Con estas herramientas se busca hacer frente a la temporada crítica de incendios, en un año en que las emergencias comenzaron de forma temprana debido a la sequía y a los chaqueos.
El director ejecutivo de la ABT comenzó su intervención explicando que esa institución tiene como atribución autorizar y supervisar las quemas en el país, haciendo notar que las ilegales son sancionadas con 0,20 centavos de dólar por hectárea de la totalidad del predio.
Con relación a los daños que dejan los incendios forestales, los datos de la ABT muestran que entre 2021 y 2023 ardieron 5.025.992 hectáreas de bosques y pastizales, aunque en algunos casos las áreas afectadas fueron las mismas.
Flores detalló que en 2021 el fuego consumió 2.338.228 hectáreas; en 2022, 1.590.541; y en 2023, 1.097.223, lo que muestra una disminución por año, que para él es fruto del trabajo conjunto entre el Gobierno, la Gobernación y los municipios.
Del total de superficie quemada en ese periodo, 2.632.050 de hectáreas fueron en áreas protegidas y reservas forestales. En 2023 ardieron 1.352.636 hectáreas en estas áreas (equivalente al 58% de los daños en ese año), en 2022 se quemaron 632.631 (40% del total) y en 2023, 646.783 hectáreas (59% del total).
Los datos también muestran que en las quemas controladas se afectaron solo 217.508 hectáreas entre 2021 y 2023. “En los lugares donde las quemas fueron autorizadas, en ninguno se descontrolaron a incendios porque las actividades son controladas”, indicó Flores al señalar que también se hicieron ajustes a los procedimientos para un mejor control de estas actividades.
Sobre las sanciones
El director ejecutivo informó que entre 2021 y 2023 se iniciaron 39 procesos penales por incendios en todo el departamento (24 en 2021, dos en 2022 y 13 en 2023). Sin embargo, hizo notar que muchos de los infractores se acogieron a procedimientos abreviados y quedaron libres, toda vez que el delito por incendio es penado por el Código Penal solo con dos a cinco años de privación de libertad.
En este sentido, Flores habló de la necesidad de endurecer las penas, por lo que pidió a los asambleístas tomar contacto con los legisladores nacionales para que se pueda modificar la normativa.
Recordó que, a través de la Ley 1525 del 9 de noviembre de 2023, se logró endurecer las sanciones de tres a ocho años de privación de libertad por el delito de incendio en áreas protegidas, reservas forestales y tierras de protección. Sin embargo, ¿qué pasa con las personas que ocasionan un incendio en tierras fiscales o privadas? Para ellos la pena sigue siendo blandengue”, señaló Flores.
El director ejecutivo de la ABT informó que en 2021 se iniciaron 128 procesos administrativos sancionadores; en 2022, 145; y en 2023, 238.
Gobernación
Sobre los incendios que se están combatiendo en estos momentos, el Sistema de Alerta Temprana de Incendios Forestales (Satif) de la Gobernación cruceña informó este miércoles que se registraban ocho incendios activos en el departamento. En lo que va del año, ya van 52.713 hectáreas afectadas por incendios en la región cruceña.