29 de junio de 2024, 19:15 PM
29 de junio de 2024, 19:15 PM
¿Qué debe hacer Bolivia para atraer inversiones? La respuesta se abordó en un encuentro sobre Energía realizado en Santa Cruz de la Sierra. Los diversos panelistas propusieron que podrían llegar inversiones petroleras desde 2030 si se mejora las condiciones económicas, legales, administrativas y operativas para la ejecución de actividades de exploración y explotación.
Esta fue la conclusión de la mesa de trabajo de Hidrocarburos, en el marco del “Foro Transición Energética Bolivia 2050” organizado por el Ministerio de Hidrocarburos, donde se definió el rumbo de las políticas en el ámbito de los hidrocarburos y energías a largo plazo.
“Hacia 2030 se pretende optimizar la posición de Bolivia a nivel regional como país atractivo para las inversiones en exploración y explotación de hidrocarburos, con políticas de regalías e impuestos sostenibles y equitativas”, informó el ministro de Hidrocarburos, Franklin Molina, al término del encuentro.
Para este objetivo, se trazó como prioridad realizar ajustes estructurales en materia de hidrocarburos para lograr mayor incremento en la producción de gas y petróleo.
Las mesas de Financiamiento climático y Biocombustibles ponderaron la transición de la matriz energética, que “implica un cambio en la forma en la distribuimos y consumimos energía, buscando reducir las emisiones de gases de efecto invernadero de los combustibles fósiles y abrazar fuentes renovables, para moldear un futuro limpio y resiliente a las generaciones futuras”.
De acuerdo con los resultados de las mesas, el desafío principal es el acceso a financiamiento climático, del sector público y privado, que incluye diseñar proyectos innovadores y formular una clasificación específica para el sector energético.
En cuanto al desarrollo de los biocombustibles hacia el 2050, se debe realizar la planificación de volúmenes, la investigación y el financiamiento. “Todo esto con el objetivo de sustituir el 100% de las importaciones de diésel fósil, insumos, aditivos y gasolinas para el 2025”.
La producción de biodiésel deberá identificar materias primas alternativas a las existentes, que no interfieran con la seguridad alimentaria y sean amigables con el medio ambiente.
En tanto, el panel de Energías renovables propuso elaborar un nuevo marco normativo para promover la transición energética. La mesa de Energías alternativas abogó por desarrollar y potenciar el hidrógeno verde, industria que requiere incentivos económicos y tributarios sin subsidios, además de la participación del sector público y privado y un marco normativo.
En el área nuclear, se sugirió implementar proyectos de reactores modulares pequeños (SMR) para apoyar la transición energética, la industrialización y la lucha contra el cambio climático.
Mientras en la mesa sobre Recursos evaporíticos y litio se concluyó que es importante promover la cooperación regional es esencial para el desarrollo sostenible de los salares y lagunas saladas, impulsando reformas en los sistemas de gobernanza, nuevos modelos de negocio y colaboración en la cadena de valor.
Igualmente se consideró fundamental un marco fiscal y regulatorio “robusto” para establecer alianzas público-privadas y normativas ambientales y sociales, para la sostenibilidad de los proyectos.
El Foro Transición Energética Bolivia 2050 se realizó el 27 y 28 de junio en la ciudad de Santa Cruz y contó con la participación de representantes de organismos multilaterales y gremios empresariales nacionales y de Santa Cruz.