1 de julio de 2024, 19:05 PM
1 de julio de 2024, 19:05 PM
El gobierno de los Estados Unidos aún evalúa la situación política de Bolivia tras el asalto militar que la pasada semana tuvo lugar en Palacio Quemado y, según anunció este lunes el Departamento de Estado, espera un análisis independiente sobre este acontecimiento.
“Entendemos y hemos tomado nota (de) los muchos puntos de vista que han surgido en los últimos días, y acogemos con agrado un análisis independiente de los acontecimientos del 26 de junio”, señaló Vedant Patel, portavoz adjunto del Departamento de Estado.
“Lo que quiero decir en términos generales es que estos acontecimientos en Bolivia dejan claro que la democracia sigue siendo frágil en algunas partes de nuestro hemisferio, y Estados Unidos tiene la intención de trabajar, conjuntamente en línea con la Carta de la OEA y la Carta Democrática Interamericana, para proteger las instituciones democráticas de los países miembros y de otros países”, remarcó el portavoz estadounidense.
La declaración del funcionario diplomático se dio en el contexto de una rueda de prensa regular, en la que respondió a una inquietud de la periodista Julia Benbrook de CNN sobre las dudas de un posible “autogolpe” y la postura de Evo Morales que rechazó el relato oficial.
Pero ante esa respuesta, la comunicadora insistió y Patel subrayó: “Ya sabe, dijimos que agradeceríamos un análisis independiente de estos acontecimientos. Dejaré que ese proceso se desarrolle antes de ofrecer una opinión adicional”, remarcó.
Una facción del Ejército boliviano liderada por el general Juan José Zúñiga, quien en esos momentos era comandante de esa fuerza militar, protagonizó un asalto a Palacio Quemado. El gobierno del presidente Luis Arce aseguró que huno un intento de golpe fallido de Estado.
La Fiscalía acusó a Zúñiga y a unas dos decenas de militares de terrorismo y alzamiento armado. El general sublevado fue enviado a prisión preventiva y la Policía aún busca a otros implicados en estos sucesos.
El mismo 26 de junio, líderes de varias naciones condenaron estos sucesos. El domingo, varios días después y tras su propio análisis, el gobierno argentino señaló que fue un hecho “fraudulento”. La Cancillería llamó al embajador argentino y protestó por esta declaración.
Otros medios internacionales como The Guardian (Reino Unido) reflejaron las dudas sobre estos sucesos que se dan en un momento de tensiones económicas.
El ex vicepresidente Álvaro García Linera, en una entrevista con La Jornada de México, cuestionó al gobierno de Arce respecto a las respuestas que espera el país en materia económica y su gestión política para llegar a 2025. Dijo que la apuesta es por la renovación.
La tensión militar del 26 de junio se dio en momentos en los que Arce perdió el control de las decisiones del legislativo, existe una crisis judicial con fallos desde el Tribunal Constitucional para regular decisiones vinculadas con los pactos políticos, según varios analistas.