2 de julio de 2024, 16:36 PM
2 de julio de 2024, 16:36 PM
Un simulacro de accidente aéreo con incendio y 62 pasajeros a bordo se llevó a cabo la tarde de este martes, 2 de julio, en el hangar presidencial del aeropuerto internacional Viru Viru, en Santa Cruz. El objetivo del ejercicio fue evaluar la capacidad de respuesta de las unidades de bomberos, emergencia y otras instituciones ante este tipo de eventos.
Durante el simulacro, se escenificó el aterrizaje forzoso de una aeronave de la aerolínea ficticia «Aerolíneas Orientales», un Boeing 727-200 con 62 pasajeros a bordo. Tras el «impacto», se simuló un incendio en la aeronave, lo que activó el protocolo de emergencia del aeropuerto.
Las unidades de bomberos y emergencia del aeropuerto, junto con la Policía Boliviana, la Fuerza Aérea Boliviana y personal médico de cinco hospitales, respondieron de manera inmediata al incidente. Los «pasajeros», interpretados por voluntarios, fueron evacuados y clasificados según la gravedad de sus «heridas» para ser trasladados a los centros de salud designados.
Elmer Pozo, director nacional de Naabol (Navegación Aérea y Aeropuertos Bolivianos), destacó la importancia de este tipo de simulacros para mejorar la coordinación entre las diferentes organizaciones que operan en el aeropuerto y garantizar una respuesta rápida y efectiva en caso de un accidente real.
«En Naabol, nos hemos preparado durante más de 120 días para realizar este simulacro con todo el personal de nuestras unidades: bomberos, agentes de operaciones y demás personal», afirmó Pozo.
El director de Naabol señaló que el objetivo principal del simulacro es verificar las reacciones inmediatas ante una emergencia, salvar la mayor cantidad de vidas posibles y restablecer las operaciones normales del aeropuerto lo antes posible.
«Este simulacro no solo lo realizamos en Viru Viru, ya lo hemos hecho anteriormente en Cochabamba, Cobija y La Paz. Como aeropuertos internacionales, debemos estar preparados para este tipo de situaciones», indicó.
Pozo enfatizó que, si bien se espera que nunca ocurra un accidente real en el aeropuerto, la normativa internacional exige que los aeropuertos realicen este tipo de simulacros de manera periódica para garantizar la seguridad de los pasajeros y la tripulación.
