6 de septiembre de 2024, 6:38 AM
6 de septiembre de 2024, 6:38 AM
El Gobierno, por medio del Ministerio de Hidrocarburos y Energías, aprobó el Decreto Supremo (DS) 5218, en el que se modifica los requisitos para que los diferentes sectores productivos puedan importar de manera directa diésel y gasolina; es decir, sin la intervención del Estado y sin el subsidio.
Alejandro Gallardo, ministro de Hidrocarburos y Energías, explicó que el DS 5218 es una modificación del DS 28419.
Actualmente, de acuerdo con el ministro del sector energético, hay nueve empresas, entre mineras, del agro y de la construcción que importan líquidos de manera directa y sin el subsidio estatal.
“Eso nos esta liberando, a la fecha, de tener que pagar unos 13.500 metros cúbicos, que equivale el consumo de un mes del departamento de Oruro”, remarcó la autoridad.
Ve que la posibilidad de que los privados importen carburantes va a permitir que el Gobierno ofrezca mejores servicios y se atienda de manera adecuada a otros sectores que necesiten diésel y gasolina.
Al respecto, Álvaro Ríos, exministro de Hidrocarburos, indicó que esta es una medida acertada que va a permitir a los agentes económicos de país tener una alternativa para poder “hacerse de forma rápida de diésel o gasolina”.
“Esta medida es un paso al retiro gradual de la subvención. Pues en el mercado van a convivir combustibles que se compraron al precio internacional y otros que aún siguen subvencionado. Con este nuevo decreto el Gobierno no hace otra cosa que reconocer que termina una etapa y eso tenía que suceder, pues el Estado ya no cuenta con los recursos necesarios para seguir comprando caro y vender barato”, explicó Ríos.
Nueva norma
En Decreto recién aprobado se reducen los requisitos técnicos y legales para que aquellas personas individuales, colectivas, empresas, cooperativas o asociaciones puedan realizar de manera directa la importación de combustible.
Se reducen los plazos, pues “antes se tardaba hasta un año para lograr completar todos los requisitos y ahora con este nuevo decreto la tardanza será de cinco a 10 días”.
Gallardo detalló que antes el certificado de calidad tenía que ser original y homologado por Instituto Boliviano de Normalización y Calidad (Ibnorca); ahora “solo pedimos una copia legalizada o con una firma digital, eso se reduce a dos días”.
“Antes también se estaba pidiendo una Declaración Jurada ante un juez, esto demoraba entre 30 y 40 días, ahora la Declaración Jurada es ante la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) y eso se realiza de manera inmediata”, puntualizó Gallardo.
Al respecto, fuentes del sector minero indicaron que con esta flexibilización de la importación de combustible se da una buena señal al empresariado del país, pues se da a entender que al Gobierno le importa que la producción tenga garantizada la suficiente cantidad de combustible, “aspecto fundamental en la producción minera”.
Sobre el tema, Geovanni Ortuño, presidente de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB), destacó el nuevo decreto e indicó que la reducción de los tiempos para autorizar la importación de diésel o gasolina es un gran apoyo al sector productivo, que tendrá una alternativa para contar con este vital insumo.
Para el economista, Germán Molina, el paso que da el Gobierno es una muestra de que ya no es posible seguir con la subvención de los hidrocarburos y que la medida a corto plazo es permitir a los empresarios importar de manera directa el combustible que necesiten, “para así evitar la escasez de los mismos que no hacen otra cosa que perjudicar a la economía del país y provocar tensiones sociales”.
“El ahorro irá en aumento y eso le interesa al Gobierno. Es de esperar que esto funcione y no se distorsione”, dijo Molina.