No cabe duda de que, en 1998, Fabio Zambrana conoció la gloria con “La Bomba”, una canción que ha dejado una huella imborrable en la música latina y se ha convertido en un himno que ha hecho bailar a generaciones enteras.
A lo largo de los años, este éxito no solo ha dominado las pistas de baile, sino que también ha revivido en plataformas como TikTok, donde famosos la siguen bailando, asegurando que “La Bomba” nunca pase de moda y mantenga en alto el nombre de Bolivia.
Fabio sigue y seguirá cosechando éxitos, ya que se viene el documental de Azul Azul y su nuevo álbum de cumbia.
¿Fabio no pasa de moda, a qué se debe?
La Bomba sigue haciendo bailar al mundo entero después de 26 años de su composición en 1998, hasta el día de hoy, 2024. Pienso que en primer lugar se debe a eso, y en segundo lugar, a que yo estoy constantemente componiendo y grabando nuevas canciones, y entregándolas a mi público. Entonces, pienso que mientras yo siga haciendo bailar al mundo entero y siga componiendo canciones, voy a poder seguir viviendo mucho tiempo más.
¿La Bomba ya no solo la bailan en Bolivia, ahora en todo el mundo?
La Bomba nació en 1998; yo la compuse, la grabé y la lancé ese mismo año. Y en 2001 llegó a ser la canción latina número uno en el mundo, certificado por la revista Billboard. Entonces, la Bomba desde ese año se baila en todo el mundo. Ya lleva 23 años como una canción que se baila globalmente.
¿Qué siente al ver que la siguen disfrutando?
Siento agradecimiento al ver que mi canción la corean, la bailan y la cantan en el exterior. Le agradezco a Dios todos los días de mi vida, porque esa canción me salvó la vida en lo económico, artístico y personal. Gracias a La Bomba sigo dando conciertos. He visto artistas como Thalía haciendo TikTok con la Bomba y personas como la esposa de Cristiano Ronaldo haciendo videos con la canción. Siento agradecimiento infinito.
¿Muchos famosos internacionales, hasta la selección boliviana, la bailan?
La selección boliviana, por ejemplo, salió recientemente en la victoria que tuvimos contra Chile, bailando La Bomba. Ninguno de esos jugadores que estaban allí bailando había nacido cuando yo la compuse. Y ellos son los mejores jugadores de Bolivia, y son jovencitos. Que ellos bailen La Bomba en un momento tan histórico como esa victoria increíble ante Chile es realmente hermoso.
¿Cuál ha sido la clave para seguir vigente tanto tiempo?
Bueno, Azul Azul nació en 1990 y estamos en 2024; son 34 años de vigencia musical, y la gente nos sigue queriendo y bailando nuestra música. Yo pienso que para lograr eso hay que tener dos cosas. Separar a Azul Azul de La Bomba es imposible. La gente que hable de la canción va a hablar del grupo. Esa canción nos identifica aquí y en la China. Y dos, el trabajo constante, la perseverancia y la constancia de seguir proponiendo canciones, de seguir componiendo y grabándolas para mi público. No todas las que compongo son éxitos, pero mi público sabe que en un rato menos pensado aparecerá una canción de Azul Azul.
¿No han pensado sacar una colaboración con La Bomba?
Las colaboraciones son muy complicadas. Son muy bonitas, se escucha muy bien, ¡guau!, una colaboración entre tal artista y tal artista, pero la historia detrás de las colaboraciones es oscura. Los artistas somos fáciles para decir: “ok, hagamos una colaboración”, pero de manera inmediata entran los abogados, y la mayoría de las veces ellos destruyen todo, porque cada abogado va a pelear por su artista. Es un proceso muy grande hacer un featuring; no es algo muy fácil, no es algo como: “oye, colaboremos y ya, digamos, sale la canción”. Hay muchos procesos legales que hay que seguir, y eso es realmente moroso.
¿Con quiénes acaba de grabar?
Recién hemos hecho una canción con Charlie Sosa, el cantante de “La Mayonesa”, y con Frank, el cantante del “Símbolo”, que para mí fue algo increíble y mágico.
¿Qué les dice a esos jóvenes que están empezando en la música?
Les digo que para que un artista sea grande, famoso, millonario y exitoso, se necesitan dos pilares. Uno: ser un buen artista. Ese es uno de los pilares. Ser artista quiere decir cantar bien, vestirse bien, dar buenas entrevistas, hacer bien tu marketing, componer y grabar. El otro pilar para ser grande en la música es ser empresario en la parte económica del artista. Ser un cantante es ser un empresario que sepa de números, que sepa lo que significan ganancias, pagar impuestos y administrar dinero. Y les doy un tercer consejo: fíjense en la mentalidad de mendigo, que es una maldición para los artistas bolivianos. Esta mentalidad dice: “no soy famoso porque no me han apoyado ni el gobierno, ni la alcaldía”. El que tiene esa mentalidad jamás va a ser famoso porque ya puso sus posibilidades de éxito en manos de otro.
¿Qué proyectos se vienen?
Bueno, acabamos de sacar “La Vuelta al Beni”, que es un enganchado hermoso, espectacular. Se viene un álbum de cumbias que estoy grabando, mi primer álbum 100% de cumbia.
Esto es una primicia, ningún medio lo sabe. Estoy en el proceso de composición; tengo 17 canciones ya compuestas y estoy grabándolas.
Ya terminé la composición y estoy en el proceso de grabación ahora. Va a tardar varios meses; dudo mucho que pueda salir este año. Es muy posible que salga a principios del próximo año, y ese va a ser un álbum revolucionario en todos los aspectos. También se viene el documental de Azul Azul, que estoy trabajando desde hace 8 años. Me tiene loco ese documental, porque es un trabajo gigante. Espero que salga el próximo año también.
¿Se viene carnaval y usted será el encargado de poner a bailar a los cruceños?
Ya estoy acabando de grabar la canción para los coronadores “Los Pengas”. La canción se llama “200 años libres y carnavaleros”, y tengo el placer de cantarla con “Los Cambitas” y Guisela Santa Cruz.