La pequeña localidad eslovena de Sevnica, lugar de origen de Melania Trump, celebra este miércoles su regreso como primera dama de Estados Unidos, un papel que en su anterior mandato disparó la popularidad de este pueblo y de Eslovenia en el mundo.
«Como alguien de Sevnica y esloveno, estoy orgulloso de que Melania vuelva a ser primera dama, e igualmente de que su hijo Barron hable y entienda el esloveno», declaró el alcalde, Srecko Ocvirk, según recoge la agencia de noticias eslovena STA.
La popularidad de Melania Trump como primera dama ya durante el primer mandato de Donald Trump como presidente de EEUU hizo que Sevnica, una pequeña localidad de unos 5.000 habitantes, y Eslovenia en general, fueran más conocidos, según el alcalde.
Y sostuvo que la historia de Melania Trump da el mensaje de que cualquier persona, desde cualquier lugar, puede lograr grandes objetivos.
«Creo que este es un mensaje muy importante para cada uno de nosotros: participa activamente en la vida, y luego llegará el éxito», añadió Ocvirk.
Desde el primer mandato de Trump (2017-2021), Melania se convirtió en todo un emblema en Eslovenia, y en Sevnica crearon hasta una marca comercial denominada «First Lady» para vender chocolates, vinos, tés, especias y dulces.
Entre las ofertas gastronómicas de la ciudad que llevan el nombre de la futura primera dama figuran varios pasteles y postres, pero la más popular es la tarta Melania, hecha de crema de chocolate blanco y nueces tostadas con caramelo.
La industria local de calzado incluso lanzó años atrás pantuflas de lujo «Casa Blanca», y cerca de Sevnica colocaron una estatua que representa a Melania.
La ex modelo, de 54 años, nació en Novo Mesto, pero se crió en la cercana Sevnica, situada también en el este de Eslovenia, pequeña república alpina que en aquel entonces formaba parte de la federación de Yugoslavia y hoy es un estado de la Unión Europea.
Terminó el colegio en Sevnica y siguió sus estudios en un centro de secundaria de la capital, Liubliana, donde empezó sus primeros trabajos como modelo.
Aún en Eslovenia, cambió su apellido Knavs por Knauss. En 1988 comenzó su carrera de modelo en Milán y París, y se mudó a Nueva York en 1996.
Cinco años más tarde obtuvo la residencia permanente y en 2006 se naturalizó estadounidense.
El exbufete de abogados de la actual presidenta eslovena, Natasa Pirc Musar, que este miércoles felicitó a Trump por su triunfo electoral, representó a Melania en Eslovenia durante el primer mandato de Trump.
«Eslovenia está dispuesta a cooperar con vosotros. Conjuntamente podemos edificar un mundo más democrático, seguro y verde», escribió Pirc Musar en la red social X.
