YPFB ha estado en el ojo de la tormenta por la escasez de combustibles. El presidente de la entidad, Armin Dorgathen habló con EL DEBER e hizo varias revelaciones.
Por ejemplo, dijo que en la actualidad, la empresa tiene unos dos o tres días de autonomía de carburantes y que esto podría ser mejor si se aprobara un crédito de libre disponibilidad en el Legislativo. Asimismo, reveló que hubo agregación de volumen, que no debía hacerse, en el último informe de las reservas de gas.
– ¿Cuáles son las causas para la escasez de gasolina y diésel?
Evidentemente durante las últimas semanas, hemos tenido una convulsión social bastante complicada. En este sentido, mientras más combustibles importemos, también aumentan los volúmenes de gasolina y diésel que se debe transportar, así que toda la logística se complica cada vez que hay algún conflicto social.
Se complica en cualquiera de los puntos de importación. Por ejemplo, en Arica (Chile) tuvimos un problema climatológico con una marejada de hasta un metro, eso complicó la descarga de combustible de los buques que están en la zona.
Por eso cuando existe algún problema logístico, como un bloqueo, como sucedió en Arica, donde por unos cuatro días nuestras cisternas no pudieron ingresar, teníamos el combustible descargado, pero los camiones no podían llegar al lugar y, por otro lado, los aditivos que ponemos a los diferentes combustibles, tampoco podían cruzar de Bolivia hacia Chile.
Ante este escenario, se retrasan lo envíos y, entre retraso y retraso, obviamente que se llega un punto en que el abastecimiento colapsa y el momento que colapsa, es difícil levantar las filas. Por ejemplo, desde el anterior sábado hemos comenzado a despachar gasolina en mayores volúmenes de lo programado para tratar de reducir en algo las filas, pero sigue habiendo y esperamos que hasta este fin de semana ya no hayan más filas, pero eso demoró más de siete días, a pesar de haber despachado uno 85% de la gasolinas que se consume.
En cuanto al diésel se ha despachado un 60% de la demanda, pero las filas siguen y nos va a llevar más días solucionar el tema. Mientras más grandes sean los volúmenes, cualquier falla logística nos genera problemas para el abastecimiento.
– Si el combustible viene de Paraguay y Argentina, ¿por qué demoró tanto en abastecerse a la región oriental?
El punto más barato de importación que tenemos y donde priorizamos el uso de recursos, siempre va a ser Arica, ¿por qué? porque en Arica tenemos un ahorro de unos 100 o 150 dólares el metro cúbico; no pasa lo mismo por los pasos de Paraguay o Argentina. Por este motivo nosotros priorizamos la importación por buque.
Entonces, al priorizar el ingreso por Arica del combustible, por los bloqueos que sufrió el país, tarda en llegar a Santa Cruz, provocando que una persona haga filas por varias horas, pero finalmente cargan gasolina o diésel; eso quiere decir que hay combustible solo que existe un retraso, pues si el camión cisterna debía llegar a las siete de la mañana, lo hace al mediodía y eso ya genera filas.
– ¿YPFB tiene deudas con sus proveedores?
Dentro de nuestros contratos nosotros tenemos un tiempo determinado para pagar. Entonces, una vez que se hace la descarga, nosotros tenemos 90, 45 y hasta 30 días para pagar dependiendo del contrato y, dentro del mismo contrato, tenemos créditos.
También tenemos un financiamiento de una cantidad determinada de millones de dólares para el ingreso de combustible. Bajo esos criterios siempre van a existir deudas, existe siempre una deuda por el tiempo de pago y por el crédito que tenemos en el contrato, pero siempre estamos dentro de los márgenes que tenemos en nuestros contratos de provisión de combustibles.
– ¿Puede precisar a cuánto asciende la deuda?
Es que no hay una deuda, es la deuda flotante, depende de cuándo llega; fluctúa, pagamos, baja y sube. Va fluctuando en función de la llegada del combustible.
– ¿Qué planes tienen para asegurar el suministro continuo y combustible y evitar este tipo inconvenientes?
Como YPFB tenemos la programación hecha para poder ingresar combustible. Ahora, nos vendría muy bien, por ejemplo, la aprobación de créditos en la Asamblea, ya el Presidente lo dijo en algún momento que hay un crédito de libre disponibilidad que no se usó en el covid, que se podría usar directamente para combustible. Eso sería espectacular porque, si tuviéramos 100 millones de dólares, podríamos ingresar una mayor cantidad de combustible al país, lo que significaría aumentar nuestros días de autonomía en tanques y con eso cualquier problema logístico, como un bloqueo de cinco días, aguantaríamos sin problemas.
En este último bloqueo hemos tenido más de 2 millones de litros de combustible parados en las carreteras. Dos millones de litros parados es un montón, es casi un día de abastecimiento de algún departamento. Entonces, dos millones de litros parados en la carretera te genera un desfase. ¿Por qué? Porque eso no llega a la planta, no se despacha, tiene que llegar a la planta, se tiene que mezclar y de ahí recién tiene que salir.
Los bloqueos complican bastante el abastecimiento. En vez de llegar en dos horas desde Palmasola a la estación de servicio, va a llegar en cuatro, ahora que estamos comenzando ya a normalizar el diésel, las cisternas van a estar circulando en las estaciones de servicio, hay que dejarlas pasar, para que puedan llegar a los puntos de venta.
– ¿De tener ese dinero que autonomía se podría tener?
Bueno, con estos 100 millones de dólares podríamos llegar a 10 días de autonomía. O sea, podríamos estar hablando de 10 días de autonomía, y eso hasta 12, contra 2, 3 días que ahora tenemos. Esta podría ser una política interesante para poder suministrar combustible y ante cualquier problema logístico, cada planta en el país tendría por lo menos unos 7 a 10 días de autonomía para poder abastecerse.
– YPFB ofrece una variedad de gasolina y diésel a mayor precio ¿eso no es un gasolinazo?
No hay un diéselazo o un gasolinazo. Simplemente, como en cualquier parte del mundo, estamos abriendo el abanico de ofertas; en cualquier estación de servicio del mundo uno va y tiene incluso la gasolina más mala que es una RON 93, la media es una 95 y la mejor que es 98-100. Nosotros tenemos una de 86 desde especial que es una gasolina de bajo octanaje, tenemos la premium que es 95 y la ultra que es 100.
Obviamente esta 86 no deberíamos tenerla, pero como es una gasolina subvencionada, sigue estando ahí, va a seguir estando ahí, porque es la gasolina subvencionada y es la que el mercado más compra, pero también mucha gente ha comenzado a comprar la ultra 100 y ha tenido muy buena respuesta en el mercado.
– ¿Cómo se va garantizar el diésel para la campaña de verano que está a punto de comenzar?
Hemos descargado recién un buque, estamos descargando otro buque con diésel y la próxima semana descargamos otro buque con el mismo combustible. Ahora que no hay bloqueos, estamos despachando al máximo posible. Las plantas están comenzando ya a tener mayor disponibilidad de producto, entonces estamos incrementando los despachos. Esperamos que hasta diciembre poder incrementar los despachos y hasta fin de meses tratar de ponernos al día con la demanda.
– Tomando en cuenta el tema del incremento del precio internacional, ¿YPFB cuenta con los recursos para solventar la importación de líquidos?
Primero se debe entender que YPFB no es el que paga. Nosotros hacemos la solicitud de pago, recibimos el dinero en bolivianos y por la diferencia de la subvención, recibimos Notas de Crédito Fiscal (Nocres) y estos bolivianos le solicitamos al Ministerio de Economía que nos den la liquidez y el Banco Central de Bolivia (BCB) es el encargado de pagar con divisas a los proveedores internacionales.
– ¿Qué pasa con los dólares por la exportación de hidrocarburos?
Los dólares por exportación, no nos llegan a nosotros, esas divisas llegan a cuentas del BCB y éste es el que nos liquida a nosotros en nuestra cuenta Héroes del Chaco en bolivianos. YPFB no maneja dólares, YPFB maneja bolivianos, Nocres y los dólares los maneja el Banco Central.
– ¿Cuándo se sabrá el dato de las reservas de gas?
La información la vamos a dar seguramente hasta fin de año, ahora estamos con el tema del abastecimiento de combustibles, lo vamos a hacer, pero para que exista mayor volumen de reservas, se debe explorar, no hay otro camino.
También se debe hacer notar que en la información de las anteriores certificaciones hubo errores de cálculo. Hubo algunas agregaciones de volúmenes que no se deberían agregar, que no es parte de una reserva probada y son volúmenes que se han incrementado.
La reserva probada que es la P1 es del 90% de certidumbre de que existe ese recurso, entonces no se pueden hacer agregaciones probabilísticas para aumentar el volumen, eso es lo que se hizo.
Sin embargo, se incrementaron los volúmenes de la reserva probada, que la reserva probada se debía haber mantenido solamente sobre el 90% de la probabilidad de ocurrencia. Entonces, se subió ahí el volumen, ya obviamente la reserva probable es 50% y la posible es de un 10%.
Por lo explicado esos ya no son los volúmenes que se manejan normalmente, uno siempre va sobre la reserva probada, sobre la P1. Se sobredimensionaron algunos parámetros, se hicieron agregaciones probabilísticas, entonces no coincide lo que se tenía en 2013. La cantidad de exploración y descubrimientos realizado entre el 2013 al 2017 y el consumo de reservas que hubo entre el 2013 y el 2017 no cuadra.
-¿Cómo marcha los servicios que podría dar YPFB a Argentina para que ellos puedan sacar su gas de Vaca Muerta para Brasil?
Hoy Bolivia está lista para transportar hasta 4 millones de metros cúbicos día de Argentina hacia Brasil. No se avanza de forma más acelerada por la normativa argentina que contempla un precio mínimo de exportación de $us 65, un costo altísimo, para que no demos cuenta un precio competitivo para Brasil es de $us 10 a $us 15 el Brent.
Argentina aparte tiene un costo de transporte altísimo y es evidente que ningún privado va a poder pagar esos costos. No es negocio que pagar el transporte de Argentina, luego pagar el transporte de Bolivia y finalmente pagar el transporte hacia Brasil.
Hace poco me reuní con las cuatro mayores productoras privadas de Argentina, están desesperados porque se bajen los costos, pero es una normativa de su país y que necesita los dólares, es incongruente, porque los dólares que necesitan están en pasar por Bolivia y venderlo en Brasil, pero ponen una normativa que lo hace inviable.
PERFIL
Armin Dorgathen Tapia es ingeniero de Petróleo y Gas natural, titulado en la Universidad Privada Boliviana (UPB). Posee maestrías en Ingeniería de Reservorios y en Gerenciamiento de Proyectos en la Escuela Nacional Superior de Geología de Francia. Actualmente está al frente de la estatal petrolera, con el reto de aumentar la oferta de hidrocarburos.