12 de diciembre de 2024, 19:30 PM
12 de diciembre de 2024, 19:30 PM
El veto a las exportaciones de aceite comestible continúa. Tras una reunión que duró más de una hora, entre el Gobierno nacional y representantes del sector oleaginoso, se informó que la medida no será levantada.
“No se levanta la suspensión de las exportaciones (de aceite), lamentablemente después de haber comprobado que hay abastecimiento, hay aceite y se está llegando a todos los mercados, pero el Gobierno dice que como no se ha visto (abastecimiento) en La Paz se va a esperar para verificar que llegue a estos mercados”, informó Jorge Amantegui, presidente de la Cámara Nacional de Industrias Oleaginosas de Bolivia (Caniob), a los medios de comunicación tras concluir la reunión.
El representante indicó que el lento abastecimiento de este producto en los mercados del interior del país, como por ejemplo La Paz, puede darse por una serie de factores.
El primero es por la logística porque no es lo mismo entregar el producto en los centros de abasto cruceños que en el mercado paceño o cochabambino y cuando llega la gente lo saca en grandes cantidades. “Y segundo es porque se está yendo de contrabando”.
Tras concluir la reunión con el Gobierno, Caniob emitió un comunicado informando que se ha cumplido lo acordado en la reunión, del pasado martes, como ser el abastecimiento de aceite a supermercados y mercados en Santa Cruz, Cochabamba y La Paz, establecer los precios de Bs 11 para el aceite embotellado y Bs 10 para el aceite a granel.
Además, los Viceministerios de Producción Industrial a Mediana y Gran Escala (VPI), de Comercio Interno y Logística (VCLI) y de Defensa al Consumidor han verificado “satisfactoriamente” los stocks en las fábricas, así como los despachos hacia Cochabamba y La Paz, confirmando la normalidad en la distribución.
“A pesar de lo anterior, el Gobierno no ha suspendido la medida restrictiva de las exportaciones de aceite refinado, afectando gravemente a toda la cadena productiva. Puesto que el mercado se encuentra en condiciones normales, pese a las adversidades ya señaladas, es posible concluir que esta medida tiene un trasfondo político”, dice el comunicado.
Agregaron que la prohibición de exportar implica una menor entrada de divisas para el país, lo que reduce los recursos de las industrias para adquirir grano de soya. “Sin este insumo, las industrias no podrán producir aceite, harinas ni cascarilla, elementos esenciales para el sector avícola, porcicultor y lechero. Esto podría resultar, a partir de enero, en una mayor escasez de alimentos básicos como aceite, pollo y cerdo para la población boliviana”.
Finalmente, dijeron que “ante la falta de resultados positivos en la reunión, convocaremos a las industrias para evaluar la situación y definir las acciones necesarias en defensa de la cadena productiva y el abastecimiento nacional”.
Por parte del Gobierno, el ministro de Desarrollo Productivo y Economía Plural, Néstor Huanca, indicó que aún se reportan problemas en la provisión de aceite en el mercado interno.
“Lo que hemos acordado es que hagan mayor esfuerzo las industrias para que puedan abastecer y trasladar rápidamente este producto al mercado”, informó Huanca en una conferencia de prensa tras la conclusión de la reunión.
Como evidencia de la irregular provisión del producto, el viceministro de Defensa al Usuario y Consumidor, Jorge Silva, expuso el incidente ocurrido hoy en la terminal de La Paz, donde, tras encontrarse en un bus una importante cantidad de aceite argentino de contrabando varias personas formaron una fila y exigieron se les vendan el producto.
Huanca defendió la determinación de suspender la exportación de aceite y negó que esta medida sea “irracional o tenga una connotación política”.
“Solamente estamos cuidando que el alimento, que se tiene en el Estado boliviano, se abastezca a las familias bolivianas. Esperemos que rápidamente se termine de normalizar el abastecimiento”, expresó.
Por último, señaló que se acordó continuar realizando reuniones de evaluación de forma permanente y anunció que continuarán los controles en los centros de abasto para verificar el abastecimiento.
“Si evidenciamos (el normal abastecimiento) y la población se siente tranquila, inmediatamente consideraremos levantar la paralización temporal de la exportación de este producto, en específico el aceite comestible”, explicó.