17 de diciembre de 2024, 12:04 PM
17 de diciembre de 2024, 12:04 PM
Dos días antes de celebrar los 19 años de su triunfo electoral, con el coronel Maximiliano Dávila extraditado a Estados Unidos, y con la orden de captura e imputación en su contra -por el delito de trata de personas-, el expresidente Evo Morales cree que su sucesor, Luis Arce, decidió ofrecerlo como trofeo al gobierno estadounidense.
“Denuncio al mundo que soy víctima de una brutal Guerra Jurídica (lawfare) ejecutada por el Gobierno de Luis Arce, que se comprometió a entregarme como trofeo de guerra a EEUU. Al igual que muchos presidentes izquierdistas de América Latina, se inventan delitos en mi contra; no respetan los principios constitucionales de presunción de inocencia y debido proceso; me condenan y fusilan jurídica, política y mediáticamente. No tienen pruebas, solo consignas y odio desenfrenado”, publicó un mensaje este martes.
La mañana de este martes, el presidente Luis Arce, evitó referirse a este caso y no respondió la pregunta que le lanzaron los periodistas en palacio de Gobierno.
El 12 de diciembre fue extraditado a Estados Unidos el coronel Maximiliano Dávila, quien fuera el último de los directores de la fuerza antidrogas de Morales, antes de su alejamiento en 2019, y quien -supuestamente- puede provocar el pedido de extradición también de Morales a ese país. Cinco días después se conoció la imputación y orden de aprehensión que libró la fiscalía de Tarija en su contra por el delito de trata de personas.
“Sufro desde hace tiempo un constante bombardeo de difamación e insultos. El Gobierno tiene un ejército de fiscales, jueces, policías y militares, que no solo buscan eliminarme política y moralmente, sino físicamente. Por eso intentaron envenenarme y matarme”, dice otra parte de su mensaje.
Mientras el senador Leonardo Loza (MAS-ala evista), en conferencia de prensa dijo que el jefe de su partido estará presente en el festejo que preparan en Chimoré, y calificó como una persecución política el caso abierto en Tarija.
Más adelante, añadió que Morales permanecerá resguardado en el trópico de Cochabamba y desafió a las autoridades a detener a todos los cocaleros, antes de aprehender a Evo Morales. No quiso confirmar o negar que los cocaleros estén preparando otras medidas de presión para impedir que detengan a su líder.
