La casa está ubicada en una calle discreta y poco transitada en la zona de Miraflores, a pocas cuadras del centro del poder que es la plaza Murillo. Allí mismo está la sede nacional del MAS, el partido que gobierna el país desde 2006, salvo entre octubre de 2019 y noviembre de 2020, el año de la transición política que tuvo lugar tras la renuncia de Evo Morales a la presidencia y que marcó la división de también llamado “instrumento político.
El diputado Rolando Cuéllar, uno de los portavoces del presidente Luis Arce en el Legislativo, llegó ayer por la mañana hasta el inmueble con la idea de “recuperarlo”. Estaba junto a varios legisladores afines y funcionarios de apoyo. Entró a las oficinas; tiró al suelo cuadros de Evo y al hacerlo terminó lesionado por esas fotos estaban protegidas con vidrio. Luego, bajo al patio; tomó un balde pintura y borró el rostro del expresidente Morales que estaba allí pintado.
“Esta es la casa del MAS, pero Evo Morales ya no es más que un pedófilo”, declaró Cuéllar ante los medios, que habían sido alertados previamente y que estaban presentes para registrar lo que sucedía. Además, advirtió que el Frente Para la Victoria (FPV), el nuevo partido con el que Morales quiere terciar en las elecciones de agosto “no utilizará nuestra sede”. Mientras el legislador pasaba la brocha a la silueta del exmandatario, sus acólitos gritaban: “¡Renovación!”
Cuéllar declaró que identificó la existencia de un vehículo y anunció que ese bien iba a pasar a la dirección nacional del MAS que está a cargo del dirigente Grover García, el líder que reemplazó a Evo en el partido, aunque bajo respaldo de Arce, el presidente que dejó abierta la posibilidad de postularse a la reelección gracias al apoyo de sus bases. Eso se verá en el congreso que se realizará a fines de mes.
“Evo Morales nunca más va a figurar en la historia del MAS”. “Pagamos impuestos a nombre del MAS y (el inmueble) está inscrito en Derechos Reales a nombre de la dirección del MAS, con esto vamos a procesar a todos los evistas por avasallar la sede del MAS, no vamos a permitir traidores que sigan en la sede”, afirmó Cuéllar en un contacto con los medios.
La respuesta
Pero, este acto provocó la respuesta inmediata de los seguidores de Evo Morales, quienes, en medio de una protesta, lograron retomar el control del inmueble. En el violento enfrentamiento, algunos militantes arcistas tuvieron que huir por los techos y varios fueron agredidos por los evistas. La policía llegó para controlar la situación, pero se retiró tras comprobar que los ánimos se habían calmado.
Los seguidores de Morales, a su turno, tomaron otro bote con pintura blanca y borraron los letreros que identifican al partido. Evo Morales firmó un acuerdo con el FPV, cuyos colores son el verde y el blanco.
De acuerdo con Cuéllar, el inmueble está registrado legalmente a nombre del MAS y cualquier intento de control por parte del FPV sería un acto de “avasallamiento”. Por su parte, Morales y su facción aseguran que la sede no está registrada a nombre del MAS, sino a nombre de personas que, en su momento, donaron o apoyaron la construcción del inmueble.
El diputado Héctor Arce, aliado de Morales, criticó duramente las acciones de Cuéllar y los suyos, calificándolas de “violentas” e “ilegales”. Además, recordó que el expresidente ya no forma parte del MAS, pues presentó su renuncia ante el Tribunal Supremo Electoral (TSE) en busca de habilitarse como candidato a la presidencia con el Frente Para la Victoria. Según Arce, el gobierno está “desesperado” y trata de frenar el ascenso político de Evo Morales a través de maniobras ilegales. Anticipó acciones en los tribunales y en las calles.
Wilfredo Chávez, uno de los abogados de Evo, anunció medidas legales contra Cuéllar y varios de sus seguidores, sin descartar que entre ellos existan funcionarios públicos. A los periodistas les mostró un zapato de una de las personas, afirmando que probablemente huyó dejando esa pertenencia antes der alcanzado. Aseguró que los arcistas cometieron varios delitos porque invadieron propiedad privada. Además, dijo que Arce intenta distraer de los problemas del país con estas acciones.
El asesor legal del presidente del Senado, Andrónico Rodríguez, y otros líderes políticos se sumaron a las críticas, señalando que el Estado debe garantizar el respeto a la propiedad privada y que los involucrados en la toma de la sede deben ser procesados por los delitos cometidos. “Lo ocurrido hoy en la sede del MAS es muy grave. No se trata de una simple disputa interna, sino de una violación de derechos”, manifestó Israel Quino, pero el arcismo reclama esa “propiedad”.
Apuntes
Acuerdo. Evo Morales y el FPV firmaron un acuerdo para participar en las elecciones de agosto. El expresidente cambió los colores de su partido en el Chapare por el verde del FPV y aseguró que está habilitado.
Congreso. El MAS de Arce, a través de un congreso que se realizará en El Alto, definirá el binomio con el que terciará en las elecciones. El presidente Arce dijo que estaba de acuerdo en ser el candidato a la reelección.
Escenario. Los dos bandos del oficialismo pasaron a las acciones legales. Ayer, la Fiscalía recibió denuncias de ambas facciones.