2 de marzo de 2024, 9:00 AM
2 de marzo de 2024, 9:00 AM
Iciar Díaz (27) dejó a un lado las coronas, por el micrófono y los escenarios, sueño que está cumpliendo a cabalidad.
Con una maleta cargada de sueños y talento llegó hasta Brasil, donde se abrió campo en la música, allí ya tuvo la oportunidad de abrir ferias, hasta cantar con famosos como Alexandre Pires.
Pero no todo es color de rosas en la vida de la ex Miss Bolivia, ella confiesa que sufrió una estafa, con un reconocido productor del vecino país, pero eso no la detuvo y siguió adelante.
Hoy, más fuerte que nunca, quiere seguir brillando, sueña con grabar una canción con algún artista boliviano y espera pronto abrir una fundación para ayudar a niños.
– ¿Por qué tomaste la decisión de irte a Brasil?
En la pandemia consigo cantar con un cantante muy grande y famoso de Brasil (Eduardo Costa) lanzamos dos canciones y una de ellas llegó a 1 millón de reproducciones solo en 24 horas, a raíz de eso gano muchos seguidores brasileños y se abren puertas que no había recibido en otros países, ni en el mío. Soy una persona de seguir señales y si en tan poco tiempo logré algo tan especial e importante, fue el factor para decidirnos ir a trabajar el sueño musical en este país.
– ¿Qué tuviste que dejar en su tierra?
Dejé a mi papá y mis dos hermanos. Cada vez que retorno a Brasil es doloroso para mí porque soy muy apegada a ellos, somos muy unidos los cinco, mi mamá y yo somos las que nos vamos a Brasil. Prácticamente, la familia se dividió físicamente por apoyar este sueño, y siempre es muy triste, pero son sacrificios necesarios por ahora.
Aquí también se quedaron las personas que quiero mucho, mis amistades, mi tierra, mis costumbres, pero siempre volvemos.
– ¿Cómo te va en Brasil?
Siempre empezar nuevamente en un país tiene sus obstáculos y dificultades. No voy a decir que todo es un camino de rosas, el año pasado fue un poco duro porque sufrimos una estafa muy grande por parte de un productor brasileño muy reconocido allí. Esa fue de las pruebas más difíciles en todos los sentidos que vivimos, pero un tiempo después se viralizaron dos videos míos cantando. Gané más seguidores y apoyo de los brasileños, inclusive Gusttavo Lima compartió uno de mis videos, así que tuvimos cosas buenas y malas, pero esta carrera es así, hay de todo y hay que saber sobrellevar las pruebas y seguir trabajando sin rendirse.
– ¿Con qué famosos te has codeado?
Canté en la fiesta de apertura de Barretos con Eduardo Costa, pude compartir con Zezé de Camargo, Alexandre Pires, Los hermanos Menotti, “Marrone” de Bruno e Marrone, con el Trío Parada Dura, Lucas e Luan, Matheus Minas e Leandro y Augusto e Atilio.
– ¿Qué proyectos se vienen?
Retornar a Brasil, lanzar las producciones que ya tenemos listas. Estamos ahora con lanzamientos de covers semanales en las redes, vamos a continuar con ello, y me encantaría sacar alguna canción colaborando con otro artista boliviano, y si Dios lo permite con artistas de Brasil también.
– ¿Hasta dónde piensa llegar?
Hasta donde Dios me lo permita, siento que Él es parte importante de este sueño, porque la música está sembrada en mi alma, es un propósito de vida, quisiera lograr grandes cosas para ayudar mucho a quienes lo necesitan. Sueño con tener una fundación para ayudar a niños sin hogares.
– ¿Estás cumpliendo tus sueños?
Sí, cuando empecé a los 16 años, ser cantante en Bolivia y Brasil era una locura, hoy es una realidad. Cada paso lo valoro y atesoro mucho, cuando el proceso lleva su tiempo se aprenden a valorar muchas cosas en el camino.
– ¿Vale la pena soñar con lo que uno quiere?
Siempre. Todos tenemos una misión en este mundo, y ese sueño que está en tu corazón tiene un propósito para tu vida y para tu crecimiento como ser humano.
– ¿Hablas el portugués fluido, dónde lo aprendiste?
Lo aprendí desde pequeña, en Inglaterra mis papás cuando salían a trabajar me dejaban con una señora brasileña que me cuidaba. Doña Rosy no hablaba ni español, ni inglés, entonces siempre me habló en portugués y terminé entendiendo todo y hablando portuñol (risas).
Pero a los 10 años -por trabajo de mis papás y vueltas del destino- nos toca vivir en Brasil por dos años, allí entré al colegio y en las tardes tenía una profesora de portugués que me ayudaba a hacer las tareas y a aprender mejor el idioma.
– Las pasarelas o la música ¿cuál elegís y por qué?
La música siempre. Las pasarelas me encantan, pero fueron un complemento en mi historia del sueño musical.
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