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7 de marzo de 2024, 18:38 PM

7 de marzo de 2024, 18:38 PM

«Yo no me presto a esto y no voy a volver más aquí». A finales de julio de 2022, el alcalde de Santa Cruz de la Sierra, Jhonny Fernández, abandonaba la reunión del Comité Impulsor del Censo. Año y medio después, retorna a un encuentro de la institucionalidad cruceña, invitado por el Comité pro Santa Cruz.

El escenario político ha mudado de actores políticos. Mario Aguilera ejerce como máxima autoridad en la Gobernación y Fernando Larach dirige la entidad cívica. El cambio de actores trae consigo un giro en la agenda política.  

Para el politólogo José Orlando Peralta, este cambio de agenda ha sido «aprovechado» por Jhonny Fernández para recuperar protagonismo político. El analista resalta el «oportunismo político» del alcalde que «ha tenido la suerte y el momento para retomar el liderazgo».

Similar impresión expresa Rolando Schrupp. «Jhonny no oculta lo que es, un agente del poder. Se aprovecha del conflicto para recobrar vigencia política», detalla el analista.

En este nuevo escenario, Fernández «pone la cara por el censo, cuando antes se mantuvo al margen. Hace campaña y se muestra como paladín del censo«, remarca Peralta.

La presencia del alcalde cuenta con el beneplácito de Aguilera y Larach quienes, en su papel de anfitriones, escoltaron a Fernández en la Cumbre por la unidad.

Para el estratega y analista político Héctor Montero esta nueva fotografía de los líderes cruceños refleja «el alineamiento con los grupos de poder en virtud a los intereses que les mueven». 

¿Un nuevo liderazgo en Santa Cruz?

Peralta destaca la «aparición de un liderazgo alternativo a Camacho» en la nueva coyuntura. Con el gobernador electo encarcelado preventivamente en Chonchocoro, «sus adversarios políticos se han reacomodado para compartir la representatividad cruceña».

Montero es más tajante y cuestiona «la orfandad de liderazgo que vivimos en Santa Cruz». Desde su mirada, la población «no confía en la política y siente una ausencia de liderazgo», que se explica porque «el gobierno ayudó a deshacerse de opositores y actores políticos».

La «rehabilitación de Jhonny se produce a puertas de un revocatorio», complementa Montero.

Por su parte, Schrupp observa un esfuerzo por «reconstruir el sistema institucional y recomponer los liderazgos más allá de los caudillos, un liderazgo mediocre, que se asienta en la unidad». En este sentido, Fernández se suma como alcalde de la ciudad y completa un cuadro de «tecnócratas que valoran por encima de todo el sistema».

Al salir de la reunión, el equipo de comunicación del alcalde compartió un TikTok con un mensaje provocativo. «Ya volvimos» se escucha en el video mientras muestra a ambas autoridades sonrientes. Y cierra el video con un abrazo entre ambos mientras se escucha «este es el dúo que se esperaba»

Los tres analistas consultados por EL DEBER coinciden en que existe la participación de operadores políticos, que han facilitado el retorno de Jhonny Fernández al marco institucional. 

«Hay gente que actúa de bisagra en torno a esta unidad, pero que antepone los intereses de los grupos de poder», apunta Montero.

Schrupp observa que esta nueva unidad se sostiene «en los intereses de las élites, que son legítimos, pero particulares». Más allá de cuestionar esta parcialización, «necesitamos que se sintonicen sus intereses con el interés común de la ciudadanía», concluye.

El interés por una unidad cruceña se contrapone con el interés político del MAS. El partido de Gobierno se mantiene firme «en su proyecto de control del poder político» y hará cualquier cosa por «dividir los intentos de reagrupación», expone Schrupp.



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