20 de marzo de 2024, 16:00 PM
20 de marzo de 2024, 16:00 PM
Wilma Kohn de Sánchez es la voluntaria más comprometida y la presidente de la Fundación Síndrome de Down, Fusindo, desde sus inicios. Incansable, siempre promoviendo sus campañas para lograr hacer visible lo invisible, a través de un grupo de niños a los que la sociedad ignoraba. Ella misma, antes de los 30 años dio a luz un niño con síndrome de Down, al que llamó José Daniel. Y este ser de luz le dio un nuevo sentido y orientación a su hogar. Una mamá que aprendió y enseñó a su familia a tratar al pequeño regalo que les dio la vida y unos años más tarde luchó por instituir una fundación. “La misión que Dios me dio fue a través de la llegada de José Daniel a la familia. Él fue la inspiración para crear Fusindo”, comparte la voluntaria emocionada.
Ya son más de tres décadas desde que un grupo de familiares y amigos se unieron para hacer realidad la Fundación Síndrome de Down, en un momento en el que la sociedad conocía muy poco sobre las capacidades y virtudes que alcanzan las personas con el síndrome. Es así como decidieron abrir un espacio donde sus hijos fueran estimulados de la manera adecuada, se hicieran visibles y sin etiquetas, y donde además tuvieran la oportunidad de aprender, desarrollarse y crecer como miembros valiosos para la sociedad.
El síndrome de Down ya no es algo raro
Hoy en día es parte de la sociedad. Muchos niños están integrados en escuelas regulares, hay jóvenes que están acudiendo a la universidad y adultos que aprendieron diversos oficios que les permite desenvolverse eficientemente en una fuente laboral.
Desde entonces son varias empresas e instituciones en nuestro medio que los ha acogido con empatía. La farmacia Chávez es la líder en dar empleo, desde hace 11 años; también ofrece trabajos la empresa DHL y hace poco Nibol y Fidalga. Esto se debe al apoyo en la difusión de información que durante años hicieron personas y medios de comunicación amigos, identificados con la misión de Fusindo. También, al trabajo incansable del directorio y al avance tecnológico que facilita el acceso a recursos y a mayor conocimiento científico.
Tenemos que mencionar al ejército de héroes anónimos: voluntarios, donantes y defensores de gran corazón que contribuyen con solidaridad y pasión a que Fusindo brille como un faro en la oscuridad, recordándonos que juntos podemos crear un mundo donde todos seamos valorados y amados sin condición.
En 2024, Fusindo no solo mira hacia atrás con gratitud, pone su fortaleza para seguir transformando vidas con esperanzas renovadas, donde la diversidad es celebrada y donde cada individuo con una condición diferente es reconocido por su aporte desde sus propias capacidades.
Estos son motivos suficientes para que el mundo entero celebre cada 21 de marzo el Día Mundial del Síndrome de Down. La fecha fue definida en 2011 por las Naciones Unidas, ONU, para simbolizar la trisomía del par 21, alteración cromosómica que da origen al síndrome. La celebración fue dispuesta con la finalidad de generar conciencia en la sociedad acerca de esta condición y enfatizar la inclusión social. Porque con este sentimiento de fe en Dios y nuestras acciones desde Fusindo nos dimos cuenta de que, “unidos podemos todo”, podemos inspirar, acoger y animar a otros a vivir con plenitud.