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3 de abril de 2024, 4:00 AM

3 de abril de 2024, 4:00 AM

El respaldo abierto del gobierno de Luis Arce a la reelección del venezolano Nicolás Maduro, que es criticado por la misma izquierda latinoamericana, aísla más a Bolivia de la región, daña la imagen internacional, a la vez que viola la Constitución Política del Estado (CPE), señalan expertos en diplomacia y exautoridades.

“Desde el Estado Plurinacional de Bolivia hacemos llegar nuestro saludo latinoamericano y revolucionario a la República Bolivariana de Venezuela, a su pueblo y al hermano presidente Nicolás Maduro, que se preparan para celebrar en un ambiente de victoria las próximas elecciones presidenciales el próximo 28 de julio”, dice parte del comunicado de la Cancillería del 30 de marzo.

Una de las primeras reacciones fue la del expresidente Eduardo Rodríguez Veltzé, quien calificó de preocupante el alineamiento ideológico de Arce, en un escenario internacional en el que hasta líderes de izquierda desaprueban las acciones de Nicolás Maduro.

“Preocupante el alineamiento ideológico del gobierno de Luis Arce. Su Cancillería anticipa ‘ambientes de victoria’ en elecciones no competitivas ni libres que han despertado la preocupación de líderes de la región y el mundo”,  dijo Rodríguez en la red X.

En mensajes y pronunciamientos los gobiernos de Sud América, excepto Bolivia, ven que con estas acciones Maduro está consolidando “una dictadura” en Venezuela, en un proceso electoral que “se ha desvirtuado por completo”.

¿Por qué Bolivia apoya a Venezuela?

Para el experto internacionalista Windsor Hernani, con el explícito respaldo a Maduro, el gobierno de Arce va en contra de la Constitución Política, viola tratados internacionales como la Carta Democrática de la ONU y de la OEA, en la que se establece que los Estados se comprometen a defender la democracia y los derechos humanos. Y no solo eso, también pone en riesgo la adhesión del país al Mercosur.

“La posición de Bolivia (con relación a Venezuela) es que en primer término viola la Constitución Política que en su artículo 255 rechaza y condena toda forma de dictadura y manda a defender la democracia y los derechos humanos (…) También pone en riesgo nuestro proceso de incorporación de Bolivia como miembro pleno del Mercosur, porque una condición sine qua non es respetar los principios democráticos y los derechos humanos”, dijo Hernani en un contacto con EL DEBER.

En tanto, el internacionalista Álvaro Del Pozo afirmó que el comunicado de la canciller Celinda Sosa “traspasa los límites de la posición neutral que deben mantener los gobiernos cuando se deben celebrar elecciones”. En vez de ello, Bolivia debió mostrar una postura neutral afirmando que se espera una elección democrática y transparente en Venezuela, donde la gane la democracia.

“El hecho de anunciar o prever una elección de victoria del gobernante de turno, en este caso del partido oficialista, creo que rompe los límites de la diplomacia. El comunicado solo debería hacer referencia al acto electoral democrático esperando que sea transparente”, apostilló Del Pozo al analizar este documento.

Además del gobierno de Arce, el expresidente Evo Morales también se pone en la línea de defensa del régimen de Maduro, quien según el exmandatario recibe “ataques preparados por el imperialismo”, y hace un llamado a todos los izquierdistas, “progresistas y humanistas” para que “no se dejen llevar por la desinformación” sobre los hechos que tienen lugar en Venezuela.

“Acepto la candidatura presidencial, la asumo, y con el apoyo del pueblo iremos a una nueva victoria de las fuerzas bolivarianas”, decía Maduro al ser proclamado nuevamente como candidato del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) en el momento más bajo de su popularidad con una aceptación del 18%.

Así como Morales, Arce, a través de la Cancillería, identifica a Estados Unidos y a organizaciones de “extrema derecha” de realizar amenazas y acciones que van en la línea de desestabilización de las elecciones” de Venezuela.

Bolivia y Venezuela están vinculados con un tratado de cooperación e integración desde 2009.

¿Qué países cuestionan a Venezuela?
Los gobiernos de Uruguay, Brasil, Argentina, Ecuador, Perú, Colombia, Costa Rica, Paraguay y Guatemala expresaron su “grave preocupación” por los “persistentes impedimentos” en la inscripción a candidatos de la oposición ante el Consejo Nacional Electoral.

¿Qué dijo Mujica sobre las elecciones de Venezuela?
El expresidente de Uruguay y un referente izquierdista, José Mujica dijo que “en Venezuela no hay respeto elemental a la oposición y eso perturba y crea una situación que no se puede llamar democracia”.



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