22 de abril de 2024, 15:12 PM
22 de abril de 2024, 15:12 PM
Un escalofriante caso de doble feminicidio conmociona a la ciudad de Santa Cruz. Un hombre de 23 años confesó haber asesinado a dos mujeres, una por estrangulamiento y la otra por sofocación, con el macabro objetivo de «experimentar» la sensación de quitar una vida humana.
Las víctimas fueron identificadas como Carla Patricia D.M., de 23 años, y una mujer conocida únicamente por el sobrenombre de «Viviana».
El autor del crimen, Cristian F.C., también de 23 años, fue detenido tras la intervención de las autoridades, cuando se encontraba a punto de enterrar a su segunda víctima.
El fiscal Daniel Ortuño, a cargo del caso, brindó detalles aterradores sobre los crímenes, que tuvieron lugar en la zona del cuarto anillo y Radial 15. Según Ortuño, el primer asesinato ocurrió el pasado domingo, cuando el presunto autor estranguló a Viviana y la enterró en la misma habitación que utilizaba como tienda comercial y vivienda.
El segundo asesinato fue igualmente brutal. El autor sofocó a la víctima y estaba a punto de enterrarla, cuando las autoridades intervinieron la madrugada de este lunes.
Terrible confesión
En sus declaraciones, Cristian F.C. confesó haber planificado ambos asesinatos. Según el fiscal, el sujeto afirmó que quería experimentar la sensación de quitar una vida humana, y admitió haber tenido relaciones sexuales con ambas después de su muerte.
«Entre los móviles que él señala es que sintió un deseo de poder experimentar la sensación de quitarle la vida a una persona. Está sujeto a investigación si las mujeres fueron víctimas de agresión sexual», indicó el fiscal Ortuño.
Dada la gravedad del caso y el comportamiento del acusado, la Fiscalía solicitará una evaluación psicológica para obtener más información sobre su perfil.
«Se ha requerido que el psicólogo le haga una valoración psicológica y podamos conocer el perfil de personalidad que tiene esta persona», señaló Ortuño.
Aparecen los familiares de una de las fallecidas
Desde la morgue, la madre de Carla Patricia, una de las jóvenes asesinadas, habló con los medios de comunicación. Relató que su hija era una joven tranquila, que estudiaba y trabajaba dos días a la semana. Describió a Carla como una chica «muy buena», que no se metía en problemas.
Además, descartó que su hija fuera trabajadora de la licorería del presunto asesino. «Dicen que era un chico que le vendía tarjetas, le daba tarjetas así a crédito», contó la madre.
