9 de junio de 2024, 4:00 AM
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Las Empresas Públicas Nacionales Estratégicas (EPNE) pagaron un 4,91% (Bs 1.785 millones) de los créditos que recibieron del Banco Central de Bolivia (BCB) hasta diciembre de 2023, señala el último informe de Política Monetaria presentado por el ente emisor en enero de este año. El saldo total de esta deuda llega a Bs 37.103 millones. Analistas consultados por EL DEBER aseguran que estos créditos mermaron las Reservas Internacionales Netas (RIN); sin embargo, el ente emisor negó esta situación.
En 2009, el entonces Gobierno del expresidente Evo Morales, a través de la Ley del Presupuesto General del Estado (PGE), autorizó al Banco Central a financiar a las Empresas Públicas Nacionales Estratégicas (EPNE) como parte del Plan Nacional de Desarrollo que estableció la administración del exjefe de estado .Las beneficiadas con estos créditos son Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Empresa Boliviana de Industrialización de Hidrocarburos (EBIH), Empresa Nacional de Electricidad (ENDE), Yacimientos de Litio Bolivianos (YLB) y la Empresa Azucarera San Buenaventura (Easba).
Muchos analistas cuestionaron estos cambios, dado que, por norma, el BCB no podía financiar a ninguna entidad del Estado. Las observaciones surgen porque compañías como YLB y EASBA no arrojaron resultados positivos.
Pagos y desembolsos
De acuerdo con el ente emisor, hasta diciembre del año pasado, el pago de estos créditos entre amortizaciones y pago de intereses llegó a Bs 1.785 millones.
Las amortizaciones a capital llegaron a Bs 1.159 millones y el pago de intereses a Bs 626 millones, mientras que el saldo total de la deuda fue de Bs 37.103 millones.
En conjunto, las EPNE incrementaron su saldo de deuda en Bs 719 millones durante 2023. Esto fue impulsado por nuevos desembolsos, principalmente a ENDE y YLB. Aunque se realizaron amortizaciones y pagos de intereses, estos no fueron suficientes para reducir el saldo de la deuda global.
Empresas bajo la lupa
Dos de estas empresas estratégicas registraron varios problemas. Por ejemplo, el Gobierno denunció malos manejos en proyectos en YLB, que incluso derivaron en el inicio de procesos judiciales contra exfuncionarios de esta compañía y exautoridades.
Los acusados fueron 10 exdirectivos y una empresa contratista por problemas encontrados en 18 piscinas evaporíticas, que no pueden entrar en operaciones, afectando la provisión de materia prima a la planta de carbonato de litio. El daño económico se calcula en más de Bs 425 millones.
Esta estatal recibió desembolsos por Bs 610 millones en 2023. Las amortizaciones sumaron Bs 267 millones y los pagos de intereses fueron Bs 27 millones, resultando en un incremento del saldo de deuda de Bs 5.214 millones a Bs 5.555 millones.
Un estudio realizado por el economista Julio Linares sostiene que, desde su creación en 2017, YLB ha registrado pérdidas acumuladas por Bs 276,3 millones.
El especialista señaló que, de acuerdo con la información oficial del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas, solo en la gestión 2022 obtuvo una ganancia de Bs 25,6 millones (menos de $us 4 millones), volviendo a tener una pérdida significativa de Bs 60,6 millones en 2023 (alrededor de $us 9 millones).
El estudio del especialista sostiene que “el 75% de los ingresos de la empresa YLB fueron por préstamos del Estado, a través de las Reservas Internacionales administradas por el Banco Central de Bolivia; significando los ingresos por exportación de productos apenas el 25% de los recursos generados en estos años”.
Linares también analizó la situación de Easba. En su estudio detectó que entre 2010 y 2018, los ingresos de esta empresa fueron Bs 80 millones, por debajo de los gastos de operación que suman Bs 311 millones.
Esto significa que existe un déficit operacional de casi Bs 211 millones. No obstante, según el Ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Plural, en 2022 reportó una “utilidad operativa positiva” por Bs 5 millones.
Durante el 2023, la compañía no realizó ni nuevos desembolsos ni amortizaciones, y no hubo pago de intereses, manteniendo constante su saldo de deuda en Bs 1.812 millones.
Análisis
Roger Banegas, exdirector del BCB, explicó que los créditos a estas empresas fueron utilizados para la compra de maquinaria y equipos en el extranjero.
Estos procesos requerían convertir los bolivianos a dólares, afectando directamente las reservas internacionales del país. “Cuando se importa una maquinaria o un equipo, es en dólares… al final del día, demandaron los dólares”, afirmó.
Originalmente, la ley del BCB no contemplaba la posibilidad de financiar a empresas estatales, pero se realizaron modificaciones legales que permitieron tales acciones mediante la aprobación de la Asamblea.
Además, Banegas sugirió que es crucial evaluar la sostenibilidad y capacidad de generación de ingresos de estas empresas para asegurar la viabilidad de los créditos otorgados.
José Gabriel Espinoza, otro exdirector del Banco Central de Bolivia (BCB), explicó que los créditos otorgados por el ente emisor inicialmente no afectan directamente a las reservas internacionales netas (que están en dólares), pero sí tienen un impacto indirecto.
“Muchas de estas empresas tomaron los créditos, tomaron esos bolivianos y luego le compraron al Banco Central dólares para hacer importaciones”, indicó.
Este proceso de conversión de bolivianos a dólares para compras en el extranjero reduce las reservas internacionales Espinoza argumentó que una de las principales consecuencias negativas de estos créditos es el bajo rendimiento de muchas empresas públicas, particularmente en sectores como el litio y la producción de azúcar.
“Esta es plata que no está generando rendimientos”, afirmó.
Respuestas del BCB
Desde el Banco Central explicaron que los créditos otorgados a las Empresas Públicas Nacionales Estratégicas (EPNE) se realizan en bolivianos. Esto significa que los fondos utilizados no forman parte de las Reservas Internacionales Netas (RIN) del país, asegurando que las reservas se mantienen intactas.
Con relación al pago de estos créditos, la entidad estatal indicó que estas compañías están cumpliendo de manera regular con sus obligaciones.
“Esto demuestra el compromiso de estas empresas con la sostenibilidad financiera y su capacidad de generar ingresos suficientes para atender sus deudas”, indicaron desde la entidad.
EL DEBER también consultó ¿Cuál fue el impacto de estos créditos en el país? Y desde la entidad indicaron que “en el marco del Modelo Económico Social Comunitario Productivo, las empresas estratégicas tienen el objetivo de diversificar el aparato productivo del país, generando fuentes de empleo y excedente económico”.
“Asimismo, y como parte de la política de redistribución del ingreso, estas empresas contribuyen en el ámbito social al aportar de manera anual para el pago del Bono Juancito Pinto, con recursos de sus utilidades generadas; sin embargo, esta información puede ser ampliada por el Ministerio de Economía y Finanzas Públicas”, señalaron.